Jesús dice:
"Yo he venido a traer fuego sobre la tierra,
¡y cómo desearía que ya estuviera ardiendo!" -Lc 12, 49-
Y yo me pregunto y te pregunto:
Y si ese fuego, ¿fuera cada una de nuestras vidas?. La mía, la tuya, la de cada persona que hoy habita nuestro mundo?...
Jesús desea que nuestro fuego encienda otros fuegos, animándolos, dando calor donde hay frío, dando ternura donde solo hay violencia...
Te dejo este relato de Eduardo Galeano, de su libro: El Libro de los Abrazos:
"Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.
A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la
vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.
- El mundo es eso reveló -. Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos
Fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento,
y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende...
- Luego de leerlo, pregúntate sobre: ¿Cómo es tu Fuego??
No hay comentarios:
Publicar un comentario